La visita del sacerdote jesuita a Setúbal, en la primera mitad del siglo XVI, cuando partía hacia Oriente en misión de evangelización, marcó a la población de Sadina hasta el punto de pedir ser proclamada patrona de la ciudad, hecho que tuvo lugar en 1703.
Francisco Xavier nació el 7 de abril de 1506 en la región de Navarra, cerca de los Pirineos franceses, y murió en la isla china de Sanchoão el 3 de diciembre de 1552. Fue canonizado en 1622.